José Jaime Valencia

26 de enero de 2009: Mi mente despertó pensando en dinero, en las palabras exactas para persuadir; la junta podía resultar en algo más importante aún que lo de los Hermanos Brahm.

Miedo, de ese miedo que sientes cuando tienes las cuerdas amarradas al arnés y estás al borde del precipicio, a punto de brincar; sabes que es algo seguro, que es algo que quieres, y aun así te tiemblan las piernas… y lo disfrutas!

Eso es lo que había en mi mente; tal vez fue que algo dentro o fuera de mí me decía ya que este día era fundamental… Trascendental. A decir verdad no sé qué fue lo que fue, ni lo quiero definir o ponerle nombre; sólo entiendo que de pronto todo perdió importancia, todo pasó a ser secundario, mientras de la nada aparecías Tú!

Cómo definir lo que pasó si todas las palabras que intento parecen insuficientes y terminan sin poder darle a La Situación Toda la Importancia que ha tenido?

Y después de platicar y hundirme en Tus Ojos y ver que Su Transparencia es Real, siguieron los mensajes… pensé que ahí terminaría, no existía en mí razón alguna para creer que pudiese suceder lo que sucedió, y menos de la forma en que sucedió! Cómo pensarlo si por fin había logrado convencerme que el corazón sólo servía para bombear sangre?

Pero entonces llamaste… y me salieron alas.

Volver a verte y no poder esperar para hacerlo se volvió en una necesidad más grande que la de respirar, y no se si esa flor te lo pudo explicar así; lo que si se es que poco a poco la gente de las mesas en el café empezaron a desaparecer, y luego el lugar, y luego todo lo demás… hasta que de pronto sólo estabas Tú… y Yo.

Cosquillas; Sinceridad; Transparencia; Mil cosas por platicar; y Risas y Risas!

Cómo explicar que no me lo esperaba? Que veía mucho muy lejana tu llegada… QUE LA SORPRESA ERES TÚ Y HABER LLEGADO ASÍ! Simplemente no alcanzarían las flores ni los poemas… Lo único que se le puede acercar, es el nuevo significado que ha tomado la palabra MUTUO.